Cuando una mujer se tiene a sí misma…
podrás entrar o salir de su vida,
podrás halagarla o juzgarla.
Y ella te recibirá o despedirá amablemente,
y ella te agradecerá y comprenderá tus sombras
porque ya conoce las suyas.
Probablemente no la toleres y a la vez quieras poseerla.
Y terminarás por alejarte si no tienes el valor de respetarla.
Cuando una mujer se tiene a sí misma,
el universo danza a sus pies.
Y ella se eleva.
Ella se vuelve compasión.
Ella elige.
Ella es consciente.
Ella da y recibe Amor.
Es sencillo reconocerla.
La mujer que se tiene a sí misma,
sonríe en el sol como en la tormenta.
Celebra la vida y comprende la muerte.
Vive y danza los procesos.
No tiene un tono, ella es un Arco iris.

María Harchanan Kaur