Los investigadores señalan que otro interrogante es el entierro de estas estructuras hace unos 9.000 años, que «añade más intriga por razones que no se comprenden del todo. Dada la larga y continua ocupación de Gunung Padang, es razonable especular que este sitio tuvo una importancia significativa, atrayendo a pueblos antiguos a ocuparlo y modificarlo repetidamente», afirman.